James Vilch era un Dios.
Dios de los negocios.
Dios de la enorme pantalla.
Dios en cama.Millonario. Playboy.
Maduro. Dominante.
Y su Jefe.Alicia Blanco no tenía ocasión.
Era su nueva asistente personal.
Y jamás hizo nada fuera de sitio.
Ella era SÓLO su asistente personal.Pero eso no era lo que deseaba.
No deseaba administrar sus aventuras.
Los chóferes que recogían a sus amantes.
Deseaba ser su amante. Ella. Y no otras.Pero no podía dar el paso.
¿Ella? ¿Ante él? ¿Qué posibilidades tenía?
¿Una chavala del montón contra un Dios?
Y todavía de esta forma, pasó.Pero. ¿de qué forma pasó?
¿Qué sucedió?
¿Y de qué manera eso podía mudarlo todo?
¿De qué forma era estar con un Dios?
Dios del Sexo contiene una historia increíble narrada por Jorge Borges.