En esta obra de autor anonimo titulada El cantar de los Nibelungos, se cuenta la proeza de Sigfrido, un perseguidor de dragones, perteneciente a la corte de los burgundios, quien a través de su ingenio consigue la mano de la princiesa Krimilda. Pero la imprudencia de una mujer termina por generar una tremenda cadena de venganza y escarmiento. El traidor Hagen, encuentra al protagonista inmune por haber sido bañado con la sangre de un dragón excepto por una pequeña parte en su espalda donde tenia una hoja de tilo y la sangre no baño su piel.