Leer a Rostovtzeff no es sencillamente leer un manual de historia. Como ocurre con Gibbon o bien Mommsen, leer a este autor es participar de los conocimientos, ya tradicionales en sí, de una de las máximas autoridades en lo que se refiere al estudio del Planeta Tradicional se refiere. Nació en la Rusia Zarista, abandonando su patria a primeros del siglo veinte, coincidiendo con la Revolución Rusa. Ocupó la Cátedra de Historia Vieja en Yale hasta su muerte, en mil novecientos cincuenta y dos. El libro que acá se nos presenta es uno de lo más insignes del autor, un material de salvedad para quien desee conocer las tesis «tradicionales» en torno al devenir del Imperio Romano. Se aconseja juicio crítico con su lectura, tener en consideración las investigaciones más modernas y, sobre todo, saber valorar el arte de saber trasmitir la historia con sencillez, disciplina, en cuanto al resto, muy descuidada.
Roma, de los orígenes a la última crisis es un libro que lleva el inconfundible sello de las novelas de Michael Rostovtzeff.